Y qué voy a cambiar si nada cambia,
si las sombras se reunen en mis venas y las pisan
con pisadas de sombra que no dejan nada,
ni huellas, ni caminos,
ecos de un delirio
de flores que se ahorcan.
Olas que rompen en las rocas
como rompen las palabras en silencios
y se desmoronan en el tiempo
que es una línea muerta y nada más
martes, 10 de febrero de 2009
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2 comentarios:
Llora un bandoneón
mientras rie la cornisa
se proyecta el Odeón
y se apaga la cenisa.
me ha gustado.. sigue así
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